“LA VIDA DESPUÉS DEL SUICIDIO”

El término «supervivientes del suicidio» se utiliza para referirse a las personas que han perdido a un ser querido debido a un suicidio. Estas personas enfrentan un duelo emocional y psicológico único, ya que la pérdida por suicidio puede llevar consigo una carga de estigma, confusión, culpa y dolor intensos. Los supervivientes del suicidio pueden ser familiares, amigos, colegas o cualquier persona cercana al individuo que ha fallecido por suicidio.

La experiencia de los supervivientes del suicidio puede ser compleja y a menudo incluye sentimientos de duelo, tristeza, ira, confusión y, en algunos casos, la búsqueda de respuestas sobre por qué ocurrió el suicidio. Es importante destacar que el apoyo emocional y la comprensión son fundamentales para ayudar a los supervivientes a enfrentar su dolor y a procesar su pérdida.

Motivados por la creencia en el poder de la solidaridad y comprensión, Efecto Mariposa se ha creado para ofrecer un espacio seguro donde los supervivientes del suicidio pueden compartir experiencias, encontrar consuelo y forjar conexiones significativas.

El nombre «Efecto Mariposa» ofrece la idea de que pequeñas acciones y gestos de apoyo pueden tener un impacto significativo en la vida de quienes han experimentado la pérdida por suicidio. Desde Salud Mental Aranda nos comprometemos a ser esa fuerza positiva.

El suicidio deja una profunda huella en los seres queridos que sobreviven. Estas personas, conocidas como supervivientes del suicidio, enfrentan una montaña emocional que incluye dolor, culpa, y muchas preguntas sin respuesta. Aquí, compartimos algunas de sus historias para iluminar su lucha, su proceso de sanación y su resiliencia:

“Me cuesta disfrutar de las cosas más sencillas; un paseo, una charla con un amigo, un baño en el mar… ya nada me sabe igual. Parece que mi vida se ha quedado en pausa, y aunque sé que no es posible sólo pienso en que vuelva”

“A veces necesito <<bajar a los infiernos>> y necesito revivir todo el dolor. Me pasa sobre todo cuando paso un día bueno. Es como si me olvidara de él, y un sentimiento de traición hace que me autocastigue una y otra vez”

“No importa cuántas veces repita en mi mente los últimos días con él, no encuentro las señales. La culpa me consume. No puedo dejar de pensar en qué podría haber hecho diferente. ¿Cómo no vi el dolor detrás de su sonrisa?”

“Siempre pensaba que estaríamos la una para la otra, que podríamos superar cualquier dificultad juntas. Ahora sólo tengo preguntas sin respuestas. ¿Por qué no me habló? ¿por qué no pude salvarla? me siento tan perdida sin ella…”

“Todos los días reviso su habitación, esperando que aparezca, como si todo esto fuera una pesadilla de la que aún puedo despertar. Pero la realidad me golpea y la sensación de vacío me consume”

Para quienes han perdido a un ser querido por suicidio, el camino hacia la recuperación es complejo y único. El dolor, la confusión y las preguntas sin respuesta son realidades con las que viven cada día. Sin embargo, es importante recordar que no tienen que enfrentar este duelo solos. El apoyo de seres queridos, grupos de ayuda mutua y profesionales puede ser fundamental para encontrar consuelo y reconstruir la vida después de una pérdida tan devastadora. Aunque el dolor nunca desaparezca por completo, con el tiempo y el apoyo adecuado, es posible encontrar momentos de paz y significado en medio de la pérdida. Cada historia de supervivencia es un testimonio de fortaleza y amor.

Si tú o alguien que conoces está lidiando con la pérdida por suicidio, no dudes en buscar nuestro apoyo. La asociación y el grupo de Efecto Mariposa estaremos encantado de abrirte nuestras puertas.

 

Fdo. Equipo de Apoyo Psicológico

 

“Educar, la llave de la igualdad”

Igualdad ¡qué palabra tan bonita!, al escucharla, al pronunciarla me invaden sentimientos positivos, nada se desequilibra, es como si la naturaleza de la cual formamos parte siguiera su ritmo sosegado y ensanchara nuestros corazones.

Me pregunto ¿Qué ocurre cuando la frustración, el desencanto por la vida y la falta de ilusión en un futuro igualitario no se vislumbra porque el  presente no es ejemplo  de  amor  que es la energía básica para construir y mantener el gran pilar de la igualdad ?

Algo falla. No olvidemos que todos nacemos iguales, con  un cerebro  que se va formando con nuestras vivencias en todos los entornos que nos criamos, las cuales nos llegan a través del lenguaje hablado, visual, escrito, en casa, en el entorno social y educativo, en los medios digitales y analógicos, en el contacto con la naturaleza, la gran olvidada hace bastantes décadas, etc…

Todas estas vivencias van conformando nuestro pensamiento, los prejuicios, las ideas, nuestros sentimientos y van dejando un poso cultural  y de comportamiento en todos  nosotros, con todos los “sesgos” que esta información conlleva.

Pienso que para alcanzar una igualdad entre todos los géneros hay que actuar conjuntamente en toda la sociedad, inculcando valores tan importantes como el “respeto”, “la escucha” y el “amor a uno mismo y a los demás”, es la energía de nuestros corazones.

Hemos de empezar en las familias, el sistema educativo y todos los medios sociales.

 

¿Cómo podemos abordar esta gran tarea, tan necesaria para el auténtico bienestar de la humanidad?

Realmente es difícil, no nos engañemos, sobre todo porque actualmente estamos instalados en una sociedad competitiva, individualista y muy alejada de la naturaleza, hemos perdido un poco el norte, hay por tanto que dar un giro de 180º.

Es un reto, hemos de empezar por los cimientos. La concienciación y educación  de cada uno de nosotros desde niños es el primer pilar, pero si los que mueven los hilos y manejan todos los engranajes  del “edificio social” no cambian sus mensajes, ni sus comportamientos, seguirán manejando la mayoría de las mentes, con lo cual se cambia muy poco, porque toda la labor que hacemos algunos la anulan ó contaminan enseguida.

Las palabras y el lenguaje visual que transmiten todos los medios informativos, los  personajes públicos, la publicidad, etc… son importantisimos para conseguir la igualdad.

No sé  si  somos conscientes de que crean realidades en nuestros cerebros, son los espejos donde se mira la sociedad y se acaban reproduciendo estos esquemas de comportamiento que transmiten y en muchas ocasiones están muy alejados  de la igualdad  de todos los géneros.

En  nuestra cultura los modelos sociales y de comportamiento  han sido patriarcales durante milenios, desde la estructura familiar hasta la social. El poder de decisión y los privilegios los tenía el hombre en detrimento  de la mujer y de otras formas de sentirse  que estaban anuladas y penalizadas.

Desde hace muy pocas décadas en las sociedades  democráticas se está trabajando desde distintos colectivos e instituciones  para revertir este patrón y alcanzar una igualdad de derechos y deberes, lo cual es necesario y muy positivo. No es tarea fácil porque conlleva cambiar no sólo estructuras o esquemas sociales, sino esquemas mentales que llevan muchos milenios en nuestra cultura.

Para ello debemos hacer una labor educativa mucho más integradora, de escucha a mujeres, hombres y todos los géneros. Cuidar las palabras sobre todo las que califican  como “machismo”, “feminismo” porque acaban  convirtiéndose  en “sesgos extremos”.

Y al final  en vez de llegar a un equilibrio, un entendimiento, que es lo que se pretende “la igualdad”, acaban  enfrentándose.

 

Mi deseo, mi gran ilusión, es que sepamos transmitir el valor de la igualdad desde que nacemos.

Es un pilar fundamental y necesario para la convivencia sana y pacifica en el fugaz paso por la vida de cada uno de nosotros.

Parece fácil, sin embargo no hemos de olvidar  la sabiduría de uno de los refranes que nos dice “ Del dicho al hecho hay un gran trecho”.

Hemos de comprometernos, ser valientes, no mirar para otro lado, que es la respuesta automática de nuestro cerebro cuando la situación es compleja y dura emocionalmente. Tenemos que dominar estos “miedos” y trabajar juntos.

Hay que aprovechar el entramado asociativo, educativo y cultural que ya existe en los ayuntamientos para trabajar juntos, niños, jóvenes, mayores y empezar tomando conciencia de que todos hemos de formarnos para ser conscientes que la igualdad  se consigue desde abajo y entre todos día a día.

Sí amamos la vida y el valor de la igualdad, uno de los objetivos principales de la educación debe ser reconectarnos con el corazón, ayudarnos a abrirlo, a ensancharlo para que el amor y el respeto sean los pilares de nuestras vidas.

Otro objetivo paralelo tiene que ser desarrollar progresivamente  niveles más elevados y profundos de conciencia igualitaria.

Si conseguimos dar estos pasos, probablemente consigamos dar un gran paso hacia  el sentimiento de igualdad en el corazón de todas las personas independientemente de su género.

 

Manos a la obra, es un gran reto de la sociedad del siglo XXI.

 Autora: Alicia Maté Aladro.

VIVIENDA SUPERVISADA: NUESTRO HOGAR. 

Actualmente en Salud Mental Aranda contamos con 4 viviendas supervisadas, con 14 plazas en total. Mucha gente se preguntará en qué consiste este servicio y cuáles son los beneficios para las personas que viven en ellas. Tres de las personas que residen en estos pisos quieren explicar desde su experiencia cómo se sienten y qué beneficios les aporta este recurso. (Para preservar la intimidad de los participantes se les ha asignado un pseudónimo). 

 

¿Cómo te sientes en la vivienda? 

Abedul: El tiempo que paso es un tiempo confortable, tenemos tiempo para ducharnos, leer, hacer actividades, cocinar. Puedo dedicar tiempo al descanso. Me siento más libre ya que puedo comprar cosas extras en los establecimientos cercanos a casa.  

Hortensia: En la vivienda me siento muy bien con las compañeras que tengo, nos apoyamos las unas a las otras. Estoy contenta con ellas, con la situación que tengo ahora. Me habéis ayudado a conseguir lo que necesitaba que era salir de ese piso en el que estaba sola y tengo a unas compañeras que aprecio junto con los monitores.   

Campanilla: Me siento bien con mis compañeras. Hacemos tareas del hogar, actividades personales, nos cuidamos entre nosotras. Me gusta porque me encuentro acompañada y más independiente. 

 

¿Qué diferencia hay entre vivir en otro recurso y la vivienda? 

Abedul: Me siento más libre, se coordinan actividades de forma más libre sin que todo esté tan organizado por tiempo y horarios. Tengo una nevera en casa donde poder meter mis cosas…  

En el otro recurso se imponen los horarios es todo muy estructurado. Aquí puedo salir al mercado, comprar… ¡Me gusta más esto!  

Hortensia: Antes, en mi piso, sentía mucha ansiedad y no me encontraba bien, sentía que no podía salir de ese bucle. Ahora estoy acompañada, hablo, salgo, veo la tele, mejorando poco a poco la ansiedad y aprendiendo cosas nuevas. Quiero aprovecharlo todo lo que pueda.   

Campanilla: Yo he vivido en una residencia y es muy diferente, nunca sabes dónde vas a acabar. Allí, también hacia muchas cosas, pero no creo que fuese mi lugar, aún soy muy joven y estoy mucho mejor aquí. Aquí salgo, entro, hago más las cosas que me gustan, estoy más tranquila. Estoy mucho mejor estando rodeada de gente de mi edad. Allí veía mucha gente mayor y me daba nostalgia y me hacía pensar mucho, dar vueltas a mi cabeza por ver como se encontraban los demás.   

 

¿Qué tiene para ti más valor? 

Abedul: Tener libertad para actuar.  

Hortensia: Para mí lo que más valor tiene es, no sentirme sola, porque la soledad a largo plazo sé que me perjudica. Ahora que estoy acompañada, significa volver a vivir bien. No cambiaría la oportunidad que tengo y la quiero aprovechar al máximo. Tengo unas compañeras y unos monitores a los que aprecio mucho.   

Campanilla: Ahora mismo, tener una vivienda donde poder vivir tranquila.   

 

¿Te parece útil el recurso? 

Abedul: Sí, me gusta el diálogo que existe, que compartimos tiempo y espacios, colaboramos entre los compañeros y nos ayudamos, es muy sencillo vivir aquí. 

Hortensia: Siento que es muy útil porque antes no me cuidaba lo suficiente. Iba a urgencias cada dos por tres, comía bocadillos y apenas me cocinaba. Ahora me siento más útil al hacer cosas y apoyar a mis compañeras. Cuando cocino o hago otras cosas, me siento mucho mejor, aprendo muchas cosas.   

Campanilla: Si, tienes un techo donde vivir y me ayudan, me apoyan, aprendo cosas nuevas y me siento mucho más realizada.   

 

Fdo. Participantes, con el apoyo del equipo técnico de Viviendas Supervisadas. 

Mi experiencia de prácticas de Educación Social

He tenido la oportunidad y la suerte de poder pertenecer a esta asociación durante 9 meses de mi vida, 9 maravillosos meses que han pasado muy rápido, significado de que he estado muy feliz aquí. Mi experiencia ha sido maravillosa desde el primer día que pisé la asociación, cuando conocí a Patri, la persona que ha sido mi tutora en todo este proceso, me dio tanta tranquilidad que supe que no me había equivocado de lugar. Me presentó al resto de compañeras que en ese momento estaban en la asociación y sentí que estaba dónde tenía que estar, todas me acogieron y me brindaron calor en ese primer día de nervios.  

Los participantes, de igual manera que las técnicas de la asociación, me trataron con muchísimo respeto desde el primer día, nunca me sentí aislada del grupo, siempre se preocupaban por saber de mí, por preguntarme cosas para romper el hielo y que yo pudiese sentirme bien, una más, y lo consiguieron.  

 

Me han gustado mucho los programas que he visto, de todos he aprendido cosas y me he sentido bien, quizá tengo especial cariño al programa de centro de día, ya que fue dónde más pude desenvolverme porque pude tener un taller propio, aunque también tuve talleres en otros programas, para mi este fue el más especial. ’A través de ti’, dónde quería demostrarles todas las capacidades que tenían y que pensaban que no. Que son capaces de hacer muchas cosas que creían que no podían, por el hecho de llevar años sin hacerlas. En definitiva, mi objetivo era que se marcharan del taller con autoestima y diciéndose a ellos mismos que pueden y que son capaces, porque lo son. 

Estoy agradecida porque he aprendido muchísimo, siempre me han dejado ser yo, nunca me he sentido juzgada y siempre he sentido que tenía un respaldo si me equivocaba, me han apoyado en el proceso y ayudado siempre que he necesitado ayuda, me han dotado de muchas herramientas para poder desenvolverme de una forma óptima y útil. He sentido el apoyo y el reconocimiento de todos, me he sentido muy valorada en todo lo que hacía y no miento cuando digo que han sido unos de los mejores meses de mi vida. 

Estoy feliz y agradecida porque he sido capaz de enfrentarme a cosas que me daban miedo, y lo he conseguido con ayuda de todos; porque he creado un vínculo muy grande con la mayoría de los participantes; por la forma en la que me he dejado conocer y en la que he podido conocer a todas las personas que forman esta maravillosa asociación; por ver que las personas que trabajan aquí son personas muy profesionales y con un afán inmenso por ayudar al resto; porque me he ido de la asociación siendo mejor persona; por todo el cariño que se me ha dado siempre; porque he aprendido, y me llevo mucho más de lo que yo he podido dar a la asociación; Estoy feliz por tantas cosas que este papel se me queda pequeño. 

Siempre voy a estar inmensamente agradecida de haber tenido la suerte de formarme en Salud Mental Aranda. Me he ido con el corazón lleno de cosas bonitas.  

Infinitas gracias. 

 Fdo. Yesica Bartolomé Hermo. 

 

COMITÉ PRO SALUD MENTAL ARANDA

El Comité Pro Salud Mental Aranda es un espacio para todos l@s participantes que acudimos a la asociación, con el objetivo de juntarnos, hablar sobre cuestiones y temas que nos interesan y preocupan, recibir información y trasladar aquellas cuestiones que consideramos importantes, y que llegan al equipo técnico y a la Junta Directiva.

Tiene ya una andadura de unos 10 años, el primero fue iniciativa de nuestra presidenta Elena Briongos y después se ha ido consolidando hasta la actualidad. Es una de las actividades a la que más asisten los participantes de la asociación y funciona muy bien desde siempre.

Celebramos el Comité normalmente el último viernes de mes, exceptuando que coincida con festivo u otra actividad que impida realizarlo.

La reunión del Comité se realiza en la sede de la asociación de la Plaza San Esteban y está compuesta por un secretario y moderador, la coordinadora (que es una técnica de la asociación) y todas aquellas personas que acudan, que suelen ser unos 20 participantes.

Cada vez que una persona se une al comité, se le informa de las normas que rigen la reunión, que son: respeto hacia todas las personas y de todos los temas, y hablar respetando el turno. También se informa que se elabora un acta de cada reunión y se recalca que lo que se hable se quedará entre nosotros, pues en el acta se registra todo de forma anónima.

La duración del Comité Pro Salud Mental suele durar en torno a una hora y media.

En él se tratan temas de acontecimientos que han pasado, que están sucediendo o que van a suceder y tienen incidencia en la asociación.

Hay un grupo de personas que se encargan de la preparación del Comité, y se reúnen una vez al mes, previo a la realización del Comité, con el apoyo de la coordinadora, y se encargan de trasladar aquellas cuestiones que consideran que pueden ser de interés de tod@s, temas que le han propuesto otras personas, agenda de las actividades de la asociación, y un largo abanico de temas, que se van proponiendo en el Comité. En esta reunión, se resume todo en una presentación, para sintetizar los temas, y que nos ayude a elaborar el acta de la reunión, donde se deja constancia de los temas tratados y de los acuerdos.

Existe un Comité Pro Salud Mental a nivel regional, que lo coordina la Federación Salud Mental Castilla y León, y en el que participamos con la asistencia de uno de nosotros. También, hay un Comité Pro Salud Mental a nivel nacional, de la Confederación Salud Mental España, y en él participa nuestro representante regional. Como se puede apreciar, los Comités son estructuras muy consolidadas, que ya tienen un gran recorrido, y que su repercusión es muy importante a nivel organizativo en las entidades del movimiento Salud Mental.

Todos los que asistimos siempre salimos muy contentos, y es por ello, que animamos a más participantes de la asociación, a que se unan y conozcan el Comité, ya que es un espacio nuestro, de todas las personas que participamos en los servicios de Salud Mental Aranda.

¡¡ OS ANIMAMOS A QUE LO CONOZCAIS POR VOSOTR@S MISM@S!!

LOS SECRETOS DETRÁS DE LOS VISILLOS

En un pequeño pueblo, de la España vaciada, de la que tanto se habla ahora, allá por los años 80, vivía la pequeña Ana, en el seno de una familia “normalita” para la época, con los recursos suficientes, no para caprichos.

Era una niña tímida, asustadiza, sentía miedo por muchas cosas que le hacían permanecer como en una alerta continua cuando se le acercaba algún hombre mayor del pueblo sobre todo el “tío Paco” o algún otro individuo que no le gustaba, que le hacía sentirse incómoda y algo en su interior le decía que se alejase. Ella no dormía bien, nunca lo dijo, tenía pesadillas, cuando se despertaba de ellas lo único que recordaba era el miedo que había pasado.

En el colegio no era de las niñas “guais” o “populares”, más bien todo lo contrario; su timidez y desconfianza le hacían permanecer en segundo plano. No se acuerda de mucho de esa etapa en el colegio ni de su infancia, la mayoría de sus recuerdos son sensaciones negativas o pequeños “flash” de alguna situación que le angustia y, que cuando aparecen en su mente no les deja que afloren, les guarda en su “baúl del olvido”.

Fuero pasando los años, seguía con sus miedos y su timidez, a veces, la cabeza le daba vueltas, pues veía y oía cosas que aun siendo pequeña sabía que no estaban bien, pero eran esas “cosas” de las que nunca se hablaba. Hasta que un día, ya en plena adolescencia, hablando con otras niñas del pueblo de sus cosillas de novietes, una de ellas comento a otra: “¿te acuerdas cuando éramos pequeñas y un día el tío Paco nos invitó a entrar con él en su corral, cerró la puerta y al momento apareció mi hermana y sus amigas? Y, ¿cómo nos sacaron de allí y le chillaron?” (nadie comentó nada, siguieron hablando de cosas de chicas). Fue entonces cuando la ya jovencita Ana recordó que una vez siendo muy pequeña, estando en el huerto con su madre apareció el tío Paco y viendo que su madre estaba atareada en preparar el huerto, quiso que Ana le siguiera ofreciéndole caramelos. Enseguida oyó a su madre gritar su nombre para que volviera y recuerda que cuando llegó a su lado, ésta le dijo muy enfadada que no se le ocurriese irse con el tío Paco a solas, ni con nadie. No obtuvo ninguna explicación más, en esa época si preguntabas por qué, la contestación era: “porque lo digo yo y punto”.

A raíz de ese día, Ana por fin supo de dónde le venía ese miedo, ese estado de alerta continuo y quizás su timidez, era por los “monstruos” (como años más tarde los llamó), que acechan a las niñas y las jovencitas del pueblo. “Monstruos”, que eran simpáticos y amables como el tío Paco, al que se le tenía gran aprecio en el pueblo; sobre todo muchas mujeres pues siempre les decía algún piropo.

Unos años después, Ana se fue a estudiar fuera de su pueblo, lejos, como muchos jóvenes de su época, con una de las becas que existían entonces. Para ella fue la oportunidad de alejarse de los “monstruos”. Decidió quedarse en el lugar donde estudió, buscó trabajo y organizó su vida.

Del tío Paco poco más supo, en una ocasión le comentaron que le habían pillado llevándose a una niña para el campo y se armó mucho revuelo en el pueblo, pero no creyeron a quien lo vio y dio la voz de alarma; dijeron que eran invenciones, ¿cómo iba a hacer eso un señor mayor. Ana se preguntó: ¿quedará alguna niña en el pueblo que no haya sentido el acoso de este individuo?

Años después de esto, en una de las llamadas habituales a su madre, ésta le comento que se había muerto el tío Paco, lo primero que se le vino a la cabeza a Ana fue: ¡ya era hora, por fin un “monstruo menos”!

Ana sigue con sus temores, con cierta desconfianza hacia algunas personas, se sigue guiando por su instinto sobre todo cuando le dice que se aleje de algo que le hace sentirse incomoda e incluso sentir miedo; sigue enviando sus “flash” de recuerdos al “baúl del olvido”.

(De aquel comentario de las amigas y de sus pocos recuerdos que enviaba al “baúl del olvido”, no dijo ni comentó nada, ¡de esas “cosas” no se hablaba!, era un tema tabú, en el pueblo se sabía que pasan, pero no se comentaban, es más se callaban; son parte de las “cosas” que pasaron en la llamada “España vaciada”, secretos que quedan detrás de los visillos)

 

Fdo. MUJER RURAL

 

Desde el grupo Sumando Voces femeninas, queremos añadir nuestras voces a relatos como el que cuenta la historia de Ana, para motivar y movilizar a otras mujeres en la lucha contra la violencia de género:

  • ¡Compañera quiero que te sientas apoyada, poderosa, valiente…! ¡Nosotras podemos, nosotras valemos! ¡Basta ya de violencia, tenemos que hacernos valer! Tenemos que ser felices.
  • Respétame, valórame.
  • Que el pasado no vuelva a tu vida. ¡¡¡Lucha!!!
  • Eres mujer de las mil batallas, luchadora, valiente. Una mujer que tiene que perder el miedo, empezar a ser ella misma y valorarse, pero sobre todo piensa en ti y se feliz. ¡¡A por todas, estamos orgullosas de ser mujeres!!
  • ¡No temas, el tiempo pone a cada persona y a cada cosa en su lugar! Las mujeres tenemos que romper con todos esos miedos y con todas esas barreras y empezar a ser felices.
  • Ahora nos toca ser felices, ahora toca seguir hacia adelante con valentía.

 

<< Pon freno a la violencia de género, todas somos personas >>

 

 

 

 

Salud Mental, Derecho Universal

Como cada 10 de octubre, celebramos el Día Mundial de la Salud Mental. Este año, el lema elegido por las votaciones de más de 2000 personas, ha sido «Salud Mental, Salud Mundial, un Derecho Universal», un lema con el que se quieren dar a conocer las principales vulneraciones de derechos humanos que se producen en el ámbito de la salud mental.

Desde Salud Mental Aranda, nos unimos a las reivindicaciones de nuestro movimiento asociativo, pero queremos poner el foco en las propuestas y soluciones, para que no se quede sólo en la conmemoración del Día Mundial, sino que la Salud Mental sea de verdad una Política de Estado.

¿Qué Propuestas planteamos?

  • Incrementar los presupuestos en salud mental porque continúan siendo insuficientes, con equipos profesionales incompletos y con falta de coordinación entre administraciones.
  • Que se tienda de forma urgente, hacia las “cero contenciones” y la erradicación de la coerción de cualquier naturaleza (física, química o emocional)
  • Que se destinen más recursos que permitan desarrollar medidas alternativas desde un enfoque de derechos humanos, cambiando el paradigma actual por uno basado en la recuperación, en la atención comunitaria y en la promoción de la autonomía de las personas. Para ello se deberían:
    • Rediseñar los espacios de hospitalización y la organización de profesionales y actividades, orientándose hacia la acogida, evitando el exceso de normas y reglas, detectando aspectos hostiles que puedan hacer que las personas puedan sentirse amenazadas y desconfiadas.
    • Establecer unidades de hospitalización con pocas camas, con ambiente terapéutico y tranquilizador, que promuevan relaciones que generen confianza, en los que la gente se sienta acogida. Dotarlas de profesionales en número, cualificación y condiciones laborales adecuadas.
    • Promover una cultura de trabajo orientada a la no coerción, que incluya la reflexión y debate permanente y la conciencia de responsabilidad entre los y las profesionales sobre el comportamiento ético con cada persona.
    • Formar a los y las profesionales en prácticas de relación terapéutica centradas en la persona. Apoyarles para que sean capaces de plantear alternativas creativas, reconocer y difundir sus esfuerzos, generando así una cultura profesional libre de coerción.

      Acto Institucional en el Ayuntamiento de Aranda de Duero
  • Que se humanicen los tratamientos y se garantice una intervención especializada centrada en la persona, que fomente la autonomía de las personas con problemas de salud mental, a través de:
    • Planes Individualizados de Atención
    • Equipos de Intervención Familiar
    • Apoyo Domiciliario a través de los equipos de salud mental en el ámbito comunitario
    • Desarrollo de equipos multidisciplinares especializados que atiendan a las personas con problemas de salud mental y sus familiares, compuestos por un número suficiente de profesionales de la Psiquiatría, Psicología, Enfermería, Trabajo Social, Educación Social, auxiliares, auxiliares de apoyo domiciliario, terapeutas ocupacionales o técnicos de integración social.
  • Que las administraciones españolas revisen su legislación actual, propongan acciones contra la discriminación y tengan presente en futuras normativas el respeto al compromiso internacional que contrajeron con la firma de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.
  • Garantizar el ejercicio de la capacidad jurídica y el sistema de apoyos: Se requiere de una inversión económica que permita la transición del modelo de sustitución de decisiones por el nuevo sistema de apoyos. Este sistema debe contar con las personas con problemas de salud mental, sus familias y las entidades sociales que representan sus intereses.
  • Fomentar el servicio de asistencia personal, un servicio dirigido a fomentar la vida independiente.

    Inauguración de la Exposición de Pintura
  • En cuanto a la información y formación:
    • Los y las profesionales de la salud mental deben fomentar el empoderamiento de las personas con problemas de salud mental en todas las facetas. En primer lugar, promoviendo su participación en su propio proceso de recuperación.
    • Formar a los profesionales de atención a la salud mental sobre la Planificación Anticipada de Decisiones, para que informen y sirvan de apoyo a las personas con problemas de salud mental y sus familias en esta tarea.
    • Que ofrezcan información clara y precisa a las personas y sus familias
    • Fomentar la denuncia de vulneraciones de derechos como una manera de hacer justicia y visibilizarlas ante las instituciones y organismos que pueden tomar decisiones.
Celebración del Día Mundial en Miranda de Ebro

Son muchas las propuestas que lanzamos, pero son todas imprescindibles y necesarias, y totalmente cohesionadas. Creemos firmemente que la FALTA DE RECURSOS ECONÓMICOS Y HUMANOS es la base de todas las necesidades que detectamos.

España invierte en salud mental el 5 % del total del gasto sanitario, lejos del 10 % que dedican de media el resto de países de la Unión Europea. Poco podemos decir ante esta realidad, y es que mientras los poderes públicos no coloquen la salud mental como una prioridad y la doten de los presupuestos necesarios, pocas o ninguna de las propuestas que hacemos se llevarán a cabo.

Por otro lado, como movimiento asociativo, también queremos que el 10 de octubre sea un día de fiesta y celebración, y desde nuestra entidad son varios los actos que hemos realizado, y de los que os dejamos una muestra aquí, pero que puedes ampliar información, en nuestros perfiles en redes sociales:  LinkedIn  Instagram  Facebook   X  YouTube

 

Fdo. Eva Fernández Aylagas. Directora de Salud Mental Aranda

¿Habéis jugado alguna vez a inventar historias?

¿Alguna vez os habéis cruzado con alguien o habéis visto a alguien en televisión o periódicos y habéis imaginado cómo será su vida?

Durante este verano, las personas que participamos en el Servicio de Asistencia Personal hemos realizado este ejercicio de imaginación, aportando cada una de nosotras nuestra creatividad para conformar una historia en común.

¿Queréis ver cómo nos ha quedado? Os invitamos a leerla, y mucho más aún a poner en práctica la creatividad, sacar a la luz nuestra imaginación, integrar las ideas individuales en proyectos colectivos y, por supuesto… ¡pasar un buen rato poniendo a funcionar nuestro cerebro!

¡Esperamos que os guste!

 

Una noche estrellada, en un pueblecito de Castilla nació una niña a la que sus padres llamaron Ana. Ella crecía muy feliz y contenta en su pueblo, ya que no le faltaba la luz del sol, de las estrellas y de la luna. Pasaba los días paseando, disfrutando al aire libre y jugando con su perrita. Un día, estando en el campo, se puso a llover y se sorprendió mucho. La lluvia chocaba en su cara y le hacía sentir muy desprotegida, dirigiéndose inmediatamente al amor de sus padres. Al llegar a casa, Ana se puso a llorar desconsolada en los brazos de su madre.

  • ¿Qué te ocurre, Ana? – Pregunta su madre.
  • Me da miedo la tormenta, sobre todo los truenos y relámpagos.
  • No te preocupes Ana, es algo natural y en casa estás a salvo; nada va a pasarte.

Ana aún no sabía que esa agua y las tormentas que cayeron los siguientes días son muy beneficiosas para la flora y la fauna que vive a su alrededor. Tras unos días cubiertos de lluvias y tormentas, Ana vuelve a salir a corretear por el monte junto con su perrita y lo disfruta mucho, sobre todo viendo unos corzos que estaban tomando el sol en un claro del monte, ¡eran preciosos!

Los días volvieron a la calma, y Ana se dio cuenta de que las tormentas habían sido buenas, más viendo ahora brillar el sol y reflejarse en el verdor de los campos. Un día tranquilo, salió antes del atardecer a coger piñas, unos palos para hacer lumbre y encontró algunas setas y hongos, que pensó llevar a sus padres para venderlas en el pueblo. Volvió a casa muy ilusionada, pero sus padres la estaban esperando con una mala noticia. Nala, su perrita, su amiga y fiel compañera, había fallecido. ¡Pobre Ana! Se sentía profundamente triste, echaba de menos a su buena amiga, y le estaba costando mucho recuperarse y se sentía sola. Sus padres, que no sabían muy bien cómo ayudar, le compraron otra perrita (pensaron que “a rey muerto, rey puesto», a veces “en el reino de los ciegos, el tuerto es el rey”.

A su nueva perrita la llamó Peggy; se decidió por ese nombre porque cuando salía el sol y le daba en la carita, se le llenaba el hocico y la naricita de pecas. Pasó el tiempo, y Ana recuperó la alegría con Peggy. Un buen día, cuando Ana se despertó, se llevó una gran sorpresa… ¡Peggy había tenido seis cachorritos!

Como no podían hacerse cargo de los seis cachorros, empezó a buscarles un dueño, pero no resultó una tarea fácil. Las personas que les adoptaran tenían que ser seres apropiados para cuidarles, pues hay que tener tiempo y paciencia para hacerse cargo de ellos y darles cariño.  Ana salía con los cachorros y Peggy a la puerta de casa, donde hablaba con todos sus vecinos para ver si alguno de ellos quería hacerse cargo de uno de ellos. Poco a poco fue regalando todos, dándoles un hogar cálido y cercano al que poder ir a visitarlos. Además de regalarlos, muchos de sus vecinos le contaron historias que la encantaba escuchar, sobre su infancia, los amigos que tenían, sus mascotas… Le gustaba mucho hablar con su vecino Cesáreo, que siempre la contaba muchas historias.

  • “Cuando yo era pequeño, mis padres tenían dos o tres perros que eran los mejores para cuidar de las ovejas. Eran preciosos. Me gustaba mucho irme con ellos por el campo, sobre todo con uno al que llamábamos Chaval, que tenía un ojo de cada color. Era el mejor perro del mundo cazando gatos y ratones…”

De todas estas conversaciones e historias que había escuchado, sacó muchos aprendizajes. Se dio cuenta de lo importantes que son los perros para las personas, de cómo nos enseñan a querer y ser queridos. También de lo importante que es que los perros tengan buenos dueños, para ser bien cuidados y educados. También descubrió en estas charlas, que todas las pérdidas son duras, también las de los perritos que nos acompañan en nuestra vida, pero que con el tiempo, y rodeándose de cariño siempre se puede salir adelante.

Después de la tormenta, llega la calma (y el aprendizaje).

¡Qué bonito es querer, y quererse!

 

                Fdo. Grupo SAP Salud Mental Aranda.

LA VOZ DE LOS FAMILIARES

La familia o el entorno más cercano de una persona con problemas de Salud Mental son primordiales y esenciales. Los familiares somos los que buscamos recursos y apoyos en un primer momento, sobre todo cuando la persona no puede por su malestar o su dolor emocional.

Estamos las 24 horas en una convivencia-vínculo constante, les apoyamos y/o acompañamos cuando lo necesitan. Desde una posición, digamos, de “observadores constantes” nos percatamos rápidamente cuando la persona empieza a encontrarse mal, incluso antes de que ella se dé cuenta.

Influimos en su educación emocional; tenemos un papel fundamental en la comunicación familiar, la escucha, la convivencia y en fomentarles la autonomía necesaria para que lleguen a un proceso de vida lo más independiente posible.

Todo esto nos puede llegar o nos llega a provocar mucha carga y desgaste no solo emocional sino también físico. ¿Cómo lo gestionamos?, somos participantes de la Asociación Salud Mental Aranda, la cual tiene un Programa de “Apoyo Familiar”, que lo realiza de forma individual o grupal mediante los denominados: GAM FAMILIAS (Grupos de Apoyo Mutuo), actualmente formamos 2 grupos.

 

¿Qué hacemos o qué aprendemos en los GAM FAMILIAS?

Lo primero que destacamos es que la Asociación a través de los GAM FAMILIAS nos proporciona un servicio donde nos ofrece información, formación, asesoramiento y apoyo para aprender a gestionar los problemas de salud mental y podamos continuar con nuestros proyectos de vida personal, laboral y de ocio.

Nos entrenamos en habilidades y capacidades en nuestro papel de apoyos, aprendemos a mejorar la comunicación, el clima familiar, a fomentar la autonomía en nuestros familiares con problemas de Salud Mental, aprendemos cómo actuar en situaciones de crisis personal y/o familiar; compartimos experiencias e información sobre todo de los recursos existentes a los que puedan acceder nuestros familiares.

Aprendemos: a ser más conscientes de que la Salud Mental es tan importante como la física; a ser más empáticos no sólo con la Salud Mental, sino con el resto de problemas sociales; a gestionar mejor nuestras emociones y pensamientos; a coger confianza y autoestima en nosotros mismos; pero, sobre todo, aprendemos a cuidarnos para poder cuidar, priorizando nuestra propia Salud Mental y  bienestar para poder afrontar de la mejor forma posible las complicaciones que nos puedan surgir en nuestro día a día; y además sentimos que no estamos solos y pensamos que la salud mental es un problema social compartido.

Comentamos y compartimos preocupaciones en torno a nuestro familiar; y ¿qué es lo que nos preocupa?:

Sobre todo el todavía estigma que existe hacia las personas con problemas de Salud Mental en la sociedad y especialmente en el entorno laboral. Se necesita más   formación e información a los trabajadores en Salud Mental y también creemos que   es necesario la creación de más puestos de trabajo adaptados, pues tener un trabajo para una persona con problemas de Salud Mental mejora mucho su autoestima, le ayuda en su proceso de recuperación y es esencial para poder llevar una vida independiente.

La brecha de género en el entorno de las familias; el acompañamiento en Salud Mental sigue cayendo principalmente en las mujeres, (en los GAM FAMILIAS solo en uno de los grupos contamos con 2 hombres el resto somos mujeres) y, en la mayoría de casos, son las mujeres las que dejan de trabajar para el cuidado del familiar, cuando es necesario.

Que no haya suficientes recursos para atender a las personas con Problemas de Salud Mental en la Sanidad Pública, esta situación puede dar paso a que se alarguen las citas y consecuentemente se pueda agravar la situación de nuestro familiar debido al retraso.

La falta de información y burocracia existentes sobre los recursos disponibles cuando aparece un problema de Salud Mental en la familia, es decir, en muchas situaciones al principio no sabes dónde acudir, qué servicios sociales existen,   tampoco tienes información sobre posibles ayudas económicas y sociales y, cuando te informas, la burocracia es complicada, en algunos casos los familiares son mayores o viven en la zona rural y les resulta más complicado. Hay que entender que cuando aparece un problema de salud mental en la familia son momentos difíciles y confusos y nuestra vida y la de nuestro familiar empiezan un duelo.

Otra preocupación más, el futuro de nuestros familiares cuando nosotros no podamos atenderlos o ya no estemos. Es cierto que cada vez existen más recursos para estas situaciones, pero en ocasiones no es fácil acceder a ellos, lleva tiempo, que a veces, no se tiene, dado que en algunos casos los familiares que apoyan, cuidan y, en ocasiones de quien depende económicamente la persona con problemas de salud mental, son personas mayores.

Y por poner una última preocupación, la elevada tasa de suicidios que se está conociendo, sobre todo en jóvenes. Creemos que es necesario que se hable de ello, con respeto, y que no se estigmatice a las familias que han pasado por esa dura experiencia.

 

También, ponemos voz a algunas reivindicaciones como familiares de personas con Problemas de Salud Mental. Las preocupaciones que hemos descrito son a su vez reivindicaciones, pero queremos añadir:

  • Educación emocional desde la infancia en los colegios.

Que se destinen más recursos a la Sanidad Pública; que exista la figura de un psicólogo en Atención Primaria sobre todo para la atención infanto-juvenil.

Más campañas de sensibilización en torno a la Salud Mental, que hablen en positivo y con un lenguaje inclusivo y respetuoso, principalmente en el mundo rural, que es donde más estigma sigue existiendo hacia las personas con Problemas de Salud Mental y sus familias.

Y, por último, también creemos que es necesario que existan más campañas de información, que se creen protocolos de actuación para detectar las conductas autolíticas, esencialmente en el ámbito de la educación, y que se doten los recursos necesarios para poder atender los posibles casos y que no tengan un final no deseado por no ser atendidos a tiempo en la Sanidad Pública por falta de recursos en Salud Mental.

 

         OPINIONES sobre ¿qué significa como familiares participar en un GAM FAMILIAS y que conocimientos nos llevamos de nuestra experiencia? (Para preservar la intimidad hemos asignado seudónimos).

María J: “Para mí el GAM es un espacio de desahogo y apoyo, en el que compartimos experiencias, de las buenas aprendemos y de las malas tratamos de gestionarlas adquiriendo conocimientos. Todos los miembros unidos por una enfermedad “la mental”. Este grupo es una terapia colectiva que nos ayuda emocionalmente con la enfermedad y con nosotros mismos. Desde mi más profundo agradecimiento, es para mí un privilegio formar parte de él”.

Isabel: “¿De qué me ha servido el GAM? A mí las reuniones del Grupo de Familias me han servido mucho porque he aprendido a encontrar serenidad para estar bien conmigo misma y a saber manejar de la mejor manera posible situaciones de crisis de mi familiar y sobre todo a darme cuenta de que no estoy sola, que hay mucha gente que necesita la misma ayuda que yo y, de cada tema vamos aprendiendo diversas maneras de mejorar y hacer las cosas de la mejor manera posible”.

Azucena: Estoy de acuerdo con todo lo expresado anterior mente. Siento que somos el motor de las personas con problemas de salud mental en muchas ocasiones de su vida, sobre todo en las que por la sintomatología están más bloqueados, o el malestar les impide poder tomar decisiones”.

Rosa: “Llevo poco tiempo en la asociación, pero una terapia es necesaria tanto para las personas con enfermedad mental como para los familiares. Les entendemos mejor a través de estos grupos, y para nosotras es un punto de desahogo, comprensión mutua y espacio de libertad. Aquí no me siento juzgada”. 

Margarita: “Hay que seguir haciendo hincapié en las campañas de sensibilización, sobre todo para un tema muy preocupante: el suicidio. No se habla de ello como se debería, no hay un plan de los gobiernos para prevenirlo o frenarlo”.

Begoña: “Como familiar me preocupa que mi hijo no tenga un buen futuro si no estoy. Hay falta de recursos para esto, quizás también sea un miedo que tengo que aprender a trabajar”.

Montaña: “Para mí fue y sigue siendo todo un acierto participar en el GAM FAMILIAS; me ha ayudado a poder entender mejor a mi familiar, a cuidarme a mí misma, a gestionar mis emociones y, sobre todo a conocer el entorno de la Salud Mental. Personalmente es una suerte poder contar con este programa de apoyo que ofrece la Asociación”. También, quiero añadir una preocupación que no hemos mencionado anteriormente, y es que hay enfermedades o síndromes menos comunes (las/os denominadas/os “raras/os”) que con el tiempo pueden llegar a desencadenar un problema de salud mental o en ocasiones viene aparejado con el síndrome o enfermedad y muchas veces no se detecta a tiempo, con las consecuencias que puede originar para la persona y su familia”.

 

PARTICIPANTES GAM FAMILIAS

 

CUANDO ME CAÍ DE LA LUNA

Cuando me caí de la luna desaparecí de la mirada de los pájaros. Los coches blancos eran transparentes y los rojos estallaban al cadencioso compás de las armonías de la partita número dos en do menor de Johann Sebastián Bach.

Eran tan turbias las aguas donde me ahogaba, que solo la luz de unos ojos azules penetró el pesado manto. Toque su mano para comprobar cuán suave es la piel de un ángel.

Mi desesperación  forjó la libertad de morir en un solo chasquido de dedos. La calma  no volvió a realizar el ejercicio mental de ser al mismo tiempo la suerte y la victoria alada semidesnuda.

En este mundo selenítico la sangre me dejó sordo y ciego. Olvidé respirar durante todo el trayecto hacia la nada, aun habiendo estado antes en ella. Quedé tendido desnudo y solo en tierra de lobos. Me asesinaron por desconocer su idioma. Los cuervos me reconocían como uno de los suyos. La locura es lo más semejante a la pura esencia del amor.

Ausente de uno mismo conquistas el paraíso perdido de los temerosos y de los invisibles. La luna confió en mi nacimiento tras mis gritos. Cuando todos se fueron me vi sonriendo a los gatos.

Nadie ha vuelto vivo de la cara oculta de la luna. Al partir de su superficie me lleve mi cuna y mi mortaja. Los círculos se comprimen creando universos donde hay más lunas que locos. Las aristas brillan dentro de otros tantos círculos imperfectos.

Pase las noches de humo jugando con la constelación de Orión a ver quién podía contener más tiempo la respiración, siempre perdí. Después de ese tiempo resquebrajado volví a sentir la presencia    del resplandor azul que siempre estaba presente. Amaneció y como única certeza estaba la esperanza del reencuentro.

Seguía sordo y ciego, pero la imprecisa oscuridad se disipaba a cada palabra dicha.

Un día vi sonreír a un girasol, aunque es difícil  creer a un tipo  con una mente permanentemente presente. El olor a humo no podía borrar la realidad  suprema de que esa circunstancia era distinta a otras más comunes.

Valió la pena coincidir conmigo mismo en ese momento, en este latido de tiempo y en el ángulo exacto de esta mirada luminosa a través del espejo.

Como Alicia, yo me precipité abruptamente  en una madriguera .No encontré ningún conejo blanco, ni una reina roja y el sombrerero  loco era el tipo más cuerdo al que pedir consejo.

La pregunta más importante es contestada con otra pregunta. ¿A que teme más la reina blanca, a sus preguntas estúpidas o a sus respuestas sabias? ¿Tú sabes quién eres?

Lo que es innegable, es que no podre perder lo que nunca he tenido.

Soy el camino, el caminante, el destino y el punto de partida.

Una cosa está clara, siempre el azul será mi color favorito y si surge alguna tribulación, pediré consejo sin dudarlo un solo instante a los girasoles.

 

Autor: El gusano exquisito.🎩