MIS PRIMERAS VACACIONES CON SALUD MENTAL

El primer día de nuestras vacaciones en las que unimos lazos Salud Mental Aranda junto con El Puente Salud Mental Valladolid.

Nos levantamos prontito rumbo a Matalascañas (Huelva). El viaje fue tedioso por su tiempo, pero mereció la pena con creces, la convivencia desde mi objetividad fue muy fluida y creamos lazos afectivos que el tiempo será quizá el único factor que nos separe.

 

Es más, nuestro súper chofer Pedro se convirtió en uno más al margen de su trabajo, nos ayudó en todo momento e incluso hizo buenas migas con los profesionales, comían juntos, etc.

 

La primera excursión fue al Parque Nacional de Doñana y el centro de interpretación fue interesante, aunque chocó un poco con los que lo observaron en primer plano ya que la sequedad del mismo era visible. Posteriormente nos dirigimos a la aldea del Rocío donde boda incluida y calesas, pudimos observar a un grupo de cantaoras rocieras que nos brindaron 3 canciones. Todos nosotros tuvimos tiempo para comprar recuerdos y tomar el refresco correspondiente. Montamos en el autobús y volvimos al hotel donde un gran bufé nos esperaba día a día. Por la tarde fuimos a la playa que tenía buena temperatura, y se hicieron grupos para quien bañarse, coger conchas o pasear por la playa o el paseo.

Nuestro segundo día, fue uno de excursión completa. Fuimos a Huelva capital donde vimos tanto por dentro como por fuera el estadio del recre y el paseo de la ría. A continuación, ya como tenían contemplado nuestros compis de Valladolid cuyos técnicos lo tenían organizado, nos dirigimos a la feria de la tapa donde pudimos probar las famosas gambitas de Huelva u otros manjares como embutidos o pulpo.

A la vuelta comimos formato picnic y una vez en el hotel fue momento para planificar nuestra tarde según preferencias: cartas, piscina, descanso…

 

El lunes nos dirigimos a Mazagón a visitar su puerto deportivo ya que había numerosas embarcaciones recreativas y una gran playa virgen donde se veía la mar en su máximo esplendor con el agua un poco brusca. Algunos se fueron con más de una concha para el hotel. También jugaron un mini torneíto a las palas y se lo pasaron increíble. En estos momentos nos sentimos libres y nadie nos juzgó. ¡No somos personas con ningún tipo de dificultad!

A la vuelta también organizamos grupos y unos fueron a la playa mientras que otros nos quedamos en el hotel entre piscina, jacuzzi y cartas.

Hasta este momento quizá no os he hablado de los espectáculos nocturnos, pero eran una pasada. Nos amenizaban las noches antes de dormir y algún que otro cantante o bailarín de nuestras asociaciones se atrevían a expresar sus dotes.

 

Al día siguiente visitamos el Muelle de las Carabelas en Palos de la Frontera donde primeramente nos proyectaron un vídeo bien explicado de la historia de las carabelas y Cristóbal Colón, en este mismo lugar tenían una réplica de cada una de ellas donde subimos y nos hicimos una pequeña idea de cómo pudieron ser los viajes. En este lugar triunfó la de la tienda de recuerdos porque todos hicimos compras.

Después visitamos el Monasterio de la Rábida. Volvimos justito para para comer en el bufé y ese día probamos la gran piscina con toboganes además del jacuzzi, juegos de cartas y la piscina del hotel. Se nos pasó la tarde en convivencia rapidísimo, quizá porque ya éramos un grupo homogéneo y nos llevábamos todos estupendamente. Cenamos y un grupo fue a andar y otro se quedó en el hotel descansando o en el espectáculo flamenco.

 

Tras descansar toda la noche nos levantamos un poquito más tarde pues ese día nos enfocamos en ver el pueblo de Matalascañas, aprovechamos la mañana para hacer algunas que otras compras y algunos se decantaron por entrar en la iglesia del pueblo, mientras otros estuvimos en la cafetería tomándonos algún refresco. Posteriormente subimos a comer y descansar y nos dieron opción de ir a donde más nos apeteciera, ya fuera playa, piscina, juegos, etc. Los que fueron a la playa volvieron a punto de cenar y cenamos todos juntos como siempre compartiendo lo mejor del día.

No es de olvidar que un día de esa semana jugó el Madrid-Barça y muchos forofos decidieron cenar antes para ver el partido. Como es de ley, en unas vacaciones se permitió para que pudieran disfrutar del partido.

 

En nuestro último día la playa fue la protagonista de la mañana, una mar super rebelde pero que hubo quien la disfrutó, y el sol nos acompañó en todo momento. También hubo quién fue a ver una roca famosa en Matalascañas a una distancia prudente de donde nos encontrábamos.

Por la tarde los técnicos nos prepararon una fiesta de fin de vacaciones muy emocionante, donde tras una merienda, bastantes compañeros compartieron actuaciones de lo que mejor se les daba hacer en el mundo del artisteo, incluso vino gente de la cafetería a vernos y éramos observados por algunas ventanas llenas de aplausos de otros huéspedes.

 

Al día siguiente partimos hacia nuestros lugares de procedencia prometiendo vernos el Día Mundial de la Salud Mental en Soria.

Ojalá podamos hacer algún otro día de convivencia para recordar momentos con la asociación El Puente Salud Mental.

El tiempo pasa, pero los recuerdos aún quedan y si son amigos y además positivos el alma se llena de orgullo.

 

Participante anónima

Beneficiaria del programa vacaciones 2024

MI VIDA CON MI ASISTENTE PERSONAL

Nací bajo el signo de Libra y así me voy a hacer llamar en este relato de buena parte de mi vida que quiero compartir con todas/os vosotras/os.

Desde niña me he considerado una persona de pensamientos románticos y soñadora, y aunque estos aspectos de mi personalidad son aparentemente buenos, durante mi adolescencia se convirtieron en un arma de doble filo ya que eso me llevó a idealizar mi vida y a no vivir en la realidad, lo que desembocó en un trastorno de la alimentación que me diagnosticaron como anorexia nerviosa. En ese momento empezaron mis problemas de salud mental que desembocó en un brote psicótico con el consecuente ingreso en la Unidad de Salud Mental. Salí de allí con una pauta de medicación psiquiátrica y más relajada. Pasaban los días y uno de ellos apareció una persona a la que conocía para dejarme unos libros ya que sabía que disfrutaba con la lectura, esta persona también sufría problemas de salud mental y me sugirió acudir a una asociación que se acababa de crear con personas y familiares de Aranda que también sufrían estos problemas, esta asociación se hacía llamar por aquel entonces FESMA.

En esos momentos la asociación se componía de pocas personas y yo, como los/as demás participantes ayudábamos en lo que podíamos para que el proyecto funcionase. Yo en concreto colaboraba escribiendo direcciones en cartas y otro tipo de recados. Acudía con otras personas a la sede y hacíamos actividades de dibujo y pintura,  estimulación cognitiva y además había un grupo de apoyo con una psicóloga. Llevo colaborando como socia de Salud Mental Aranda desde entonces, siendo testigo de cómo ha ido creciendo por la necesidad que ha ido surgiendo entre la población de Aranda con el paso del tiempo.

El ASISTENTE PERSONAL Y QUE HA SUPUESTO EN MI RECUPERACIÓN Y EN MI VIDA

En la asociación se han ido añadiendo diferentes programas ligados a las necesidades que este colectivo ha ido demandado, uno de ellos, y del que yo participo desde hace algo más de dos años, es el del Asistente Personal.

Como todas/os sabemos la pandemia fue un duro golpe para la sociedad en general y para mí en particular, de esta resultó que me ingresaran en la Unidad de Salud Mental del HUBU y que de ahí pasara a Fuente Bermeja donde pasé tres meses que me ayudaron a coger nuevas y mejores rutinas diarias y donde hice nuevas amistades. A mi vuelta a casa en Salud Mental Aranda me recibieron con los brazos abiertos dispuestas/os a darme todas las herramientas para seguir mejorando, entonces me ofrecieron un Asistente Personal, me explicaron en qué consistía y que me ayudaría a seguir en mi proceso de recuperación.

Me veo con mi asistente una semana durante una hora, y la siguiente semana son dos horas en días diferentes. Desde el principio enganchamos muy bien ya que me demostró confianza y mucha comprensión por su parte. Con ella puedo hablar de lo que quiero con total libertad, sin miedo a que me juzgue y es muy sincera conmigo, por lo que me sirve como desahogo. También me ayuda a encontrar los sitios donde buscar la información que necesito, a preparar las citas con mi psiquiatra, me acompaña en el transcurrir de mi vida por lo que me siento apoyada y acompañada. Si recaigo o doy un pasito para atrás sé que tengo este apoyo y eso me hace sentir más segura. Para mí ha llegado a ser como una amiga o una hermana con la que puedo contar en todo momento y siempre está ahí.

He elegido una foto con una mariposa ya que me encanta sentarme en el parque y observar cómo mueven sus alas de esa manera tan delicada y que representa muy bien la relación que tengo con mi Asistente Personal. La vida tiene muchas cosas buenas y sencillas que son las que realmente merecen la pena y de las que hay que aprender a disfrutar, y que debemos conservar.

 

 

“LA VIDA DESPUÉS DEL SUICIDIO”

El término «supervivientes del suicidio» se utiliza para referirse a las personas que han perdido a un ser querido debido a un suicidio. Estas personas enfrentan un duelo emocional y psicológico único, ya que la pérdida por suicidio puede llevar consigo una carga de estigma, confusión, culpa y dolor intensos. Los supervivientes del suicidio pueden ser familiares, amigos, colegas o cualquier persona cercana al individuo que ha fallecido por suicidio.

La experiencia de los supervivientes del suicidio puede ser compleja y a menudo incluye sentimientos de duelo, tristeza, ira, confusión y, en algunos casos, la búsqueda de respuestas sobre por qué ocurrió el suicidio. Es importante destacar que el apoyo emocional y la comprensión son fundamentales para ayudar a los supervivientes a enfrentar su dolor y a procesar su pérdida.

Motivados por la creencia en el poder de la solidaridad y comprensión, Efecto Mariposa se ha creado para ofrecer un espacio seguro donde los supervivientes del suicidio pueden compartir experiencias, encontrar consuelo y forjar conexiones significativas.

El nombre «Efecto Mariposa» ofrece la idea de que pequeñas acciones y gestos de apoyo pueden tener un impacto significativo en la vida de quienes han experimentado la pérdida por suicidio. Desde Salud Mental Aranda nos comprometemos a ser esa fuerza positiva.

El suicidio deja una profunda huella en los seres queridos que sobreviven. Estas personas, conocidas como supervivientes del suicidio, enfrentan una montaña emocional que incluye dolor, culpa, y muchas preguntas sin respuesta. Aquí, compartimos algunas de sus historias para iluminar su lucha, su proceso de sanación y su resiliencia:

“Me cuesta disfrutar de las cosas más sencillas; un paseo, una charla con un amigo, un baño en el mar… ya nada me sabe igual. Parece que mi vida se ha quedado en pausa, y aunque sé que no es posible sólo pienso en que vuelva”

“A veces necesito <<bajar a los infiernos>> y necesito revivir todo el dolor. Me pasa sobre todo cuando paso un día bueno. Es como si me olvidara de él, y un sentimiento de traición hace que me autocastigue una y otra vez”

“No importa cuántas veces repita en mi mente los últimos días con él, no encuentro las señales. La culpa me consume. No puedo dejar de pensar en qué podría haber hecho diferente. ¿Cómo no vi el dolor detrás de su sonrisa?”

“Siempre pensaba que estaríamos la una para la otra, que podríamos superar cualquier dificultad juntas. Ahora sólo tengo preguntas sin respuestas. ¿Por qué no me habló? ¿por qué no pude salvarla? me siento tan perdida sin ella…”

“Todos los días reviso su habitación, esperando que aparezca, como si todo esto fuera una pesadilla de la que aún puedo despertar. Pero la realidad me golpea y la sensación de vacío me consume”

Para quienes han perdido a un ser querido por suicidio, el camino hacia la recuperación es complejo y único. El dolor, la confusión y las preguntas sin respuesta son realidades con las que viven cada día. Sin embargo, es importante recordar que no tienen que enfrentar este duelo solos. El apoyo de seres queridos, grupos de ayuda mutua y profesionales puede ser fundamental para encontrar consuelo y reconstruir la vida después de una pérdida tan devastadora. Aunque el dolor nunca desaparezca por completo, con el tiempo y el apoyo adecuado, es posible encontrar momentos de paz y significado en medio de la pérdida. Cada historia de supervivencia es un testimonio de fortaleza y amor.

Si tú o alguien que conoces está lidiando con la pérdida por suicidio, no dudes en buscar nuestro apoyo. La asociación y el grupo de Efecto Mariposa estaremos encantado de abrirte nuestras puertas.

 

Fdo. Equipo de Apoyo Psicológico

 

UN DÍA “CUALQUIERA” 

Por fin llegó la final de nuestra Liga Mentegoles, un día no solo para decidir quien gana, sino un día de convivencia del Movimiento Asociativo de  Salud Mental de Castilla y León.  

El año pasado algunos entrenadores de nuestros equipos nos contaron su experiencia y este año les traemos un reportaje de como lo han vivido los participantes en primera persona: jugadores, utilleros y animadores. Desde Aranda acudimos un total de 38 personas. 

Comenzamos contando la participación de equipos, que este año han sido 8. A nuestro equipo, Salud Mental Aranda este año nos tocó jugar con Salud Mental Salamanca y la victoria fue para ellos, pero disfrutamos mucho del partido, porque lo importante es participar. 

La final fue Salud Mental Burgos contra Salud Mental León, la victoria cayó para Burgos, y es que juegan muy bien y otro punto a su favor es que son más jóvenes y eso se nota. Pero hubo trofeos y medallas para todos los equipos que participaron, como recuerdo de este día tan especial. 

En el equipo de La Línea Intermedia, el programa de radio de Salud Mental Aranda tenemos a dos de los jugadores que nos han dejado su opinión sobre el día, otro miembro del equipo es uno de los utilleros de Salud Mental Aranda, así que esto es lo que hemos vivido y cómo pasamos ese día. 

Todos los jugadores comentamos que fue un partido difícil y entretenido, y que nos quedamos con ganas de jugar más, pero como entre partido y partido había concurso de aficiones de equipos nos lo pasamos genial y, lo mejor vino después, durante la comida y el baile también con animación donde pudimos disfrutar todos los equipos juntos y compartir experiencias, risas, etc.

También comentamos que  se nota que cada vez los equipos son más competitivos, que están mejor preparados y como hemos mencionado anteriormente, algunos de ellos están formados por personas más jóvenes. 

Nuestro utillero nos comenta que desde su punto de vista el partido fue difícil, aunque se jugó bastante bien, pero no siempre se gana. Para él su trabajo se ve igual de complicado que cuando salen a jugar fuera, y en esta ocasión algo más pues el autobús les dejó un poquito más lejos del pabellón, ya que eran fiestas en Zaratán. 

Pero a pesar de todo lo disfrutó mucho, sobre todo cuando se fue a tomar un cafecito antes de la final y compartió un ratito con el equipo para comentar cómo había ido el partido. En la comida y en el baile se lo pasó muy bien, a pesar de que bailó poco, pues le gusta más ver como baila la gente que bailar él. Destaca que la convivencia entre asociaciones fue divertida. 

Nuestros animadores y animadoras lo dieron todo, no pararon de animar en todo momento; llevaron pompones y pancartas realizadas en la asociación para la ocasión, para que se les viera bien y el equipo sintiera su apoyo en todo momento. 

En el baile después de la comida, no pararon de moverse, sobre todo las personas más bailarinas, que tenemos unas cuantas en Salud Mental Aranda, y es que con música y baile afloran nuestras emociones positivas. 

Como han podido saber, el día de la Final de la Liga Mentegoles para el Movimiento Asociativo de la Salud Mental de Castilla y León, no es solo un día para decidir quién gana la Liga, que es lo de menos, es un día de convivencia, de compartir juego, comida, baile, etc. Un día de reencuentro entre las asociaciones que participamos en la Liga Mentegoles, de reencuentro con personas a las que hace mucho tiempo que no ves, en definitiva, es un día para disfrutar y para seguir creando lazos de amistad. 

Además, este año tuvimos celebración, pues La Liga Mentegoles ha celebrado su 10º Aniversario y como novedad se ha rendido homenaje a las aficiones que siempre acompañan a sus equipos y, para ello, se celebró el “Primer Concurso de Aficiones”, que le ganó Salud Mental Segovia.  

Todas y todos ya estamos contando los días para que llegue la próxima Liga Mentegoles y también para que llegue el próximo encuentro del movimiento asociativo de la Salud Mental de Castilla y León, que será el 10 de octubre en la celebración del Día Mundial de la Salud Mental.

Fdo. Participantes de la Liga Mentegoles y participantes de La Línea Intermedia,  el programa de radio de Salud Mental Aranda en Radio Iris 7

No nos dejan ser felices: vivir con T.E.A.

Supongo que todos conocéis ese típico juguete para niños pequeños en los que tiene que encajar unas piezas con formas geométricas simples para que caigan en un cubo. Ahora imaginad que, por alguna razón, hay una pieza diferente que no encaja en ninguno de los agujeros; no es un círculo ni un cuadrado… No es una pieza con forma “normal”. ¿Qué hacer con ella?

¿La desechas y la tiras? Parece evidente que salió defectuosa.

¿La haces encajar aunque sea a martillazos? Posiblemente la acabarás rompiendo.

¿La limas y la adaptas para que encaje? Perderá su forma original pero, al menos, funcionará.

 

Así es como nos hemos sentido tratadas las personas con Asperger, autismo de alto rendimiento o como quieran llamarnos.

Pero… ¿Qué es el síndrome de Asperger? Según dicen los estudiosos de neurología, es un “trastorno del neurodesarrollo” o para entendernos, nuestro cerebro funciona diferente al vuestro. Por tanto, nuestro comportamiento es distinto, ya que percibimos el mundo de otra manera.

Por ejemplo, algo tan común como ir al supermercado, para mí es un desafío aterrador. Sin embargo, podría estar hablando en público, sin problemas, sobre la evolución de la aeronáutica durante horas.

 

El ofuscado dueño de la pieza defectuosa, después de haberla desechado, amartillado o limado, quizá se dará cuenta algún día, de que esa pieza no era un juguete. Era la pata de una silla, la rueda dentada de un motor o un vaso de diseño vanguardista. Es decir, un objeto útil y funcional, para un cometido concreto, al que ha deformado perdiendo su capacidad que lo hacía especial, convertido ahora en un juguete infantil.

Afortunadamente, los humanos no somos juguetes; pero durante nuestra vida, especialmente en la adolescencia, tenemos que encajar con el resto de la sociedad y pobre del que no pase por el patrón establecido. Como decía un amigo mío: “El clavo que más sobresale, es el que más palos se lleva”.

 

De niño no me gustaba jugar al futbol; yo quería jugar a “Vietnam”, ser un capitán de los Boinas Verdes y arrastrarme por la hierba como si fuera una jungla frondosa. Me podía pasar horas hablando de aviones y de mayor quería ser piloto de un F-14 Tomcat, como Tom Cruise en TOP GUN. A la edad de 9 años, cuando empiezas a formar tu propia identidad, tu personalidad, empieza también el acoso escolar.

La pieza es defectuosa y hay que desecharla.

 

El colegio podía llegar a convertirse en una pesadilla cuando, no solo los alumnos, sino también los profesores se burlan de ti por ser diferente… o peor, te castigan. Salvo muy honrosas y queridas excepciones, ningún profesor vio que yo no era como los demás. En la ESO y Bachillerato sacaba notas horribles y suspendí muchas asignaturas, pero me sabía de memoria las prestaciones de casi todos los cazas americanos fabricados desde la II Guerra Mundial, las batallas más importantes de la historia o era capaz de escribir aventuras con una imaginación desbordante. Repetí curso tres veces.

Si yo ya leía Amadís de Gaula, ¿por qué tengo que leer El Quijote? Yo aprendía por mi cuenta, me apasionaba leer las enciclopedias que había en casa. Pero en el colegio, todo se volvía aburrido o peor, odioso. Me parecía una cárcel donde te obligan a aprender cosas de memoria bajo pena de castigos o una fábrica donde los estudiantes son meros productos de una cadena de montaje.

La pieza tiene que encajar aunque sea a martillazos.

 

Mis padres siempre se preocuparon por mis notas; me castigaban cuando suspendía exámenes, ya fuera quitándome los videojuegos o prohibiéndome ver la tele. Obviamente, esos castigos no funcionaban. Tan solo, cuando me prometieron comprarme una videoconsola nueva si sacaba buenas notas, realmente me esforcé. Una vez cumplida la promesa, mis notas volvieron a bajar. Mi único aliciente para aprobar era para evitar los castigos y regañones.

Desesperados, mis padres preguntaron en el colegio si yo necesitaba algún trato especial, ya que no era normal que un niño brillante sacara tan malas notas de pronto. Estuve presente en aquella reunión y recuerdo a mi madre preguntar al tutor de la clase: “¿Es que mi hijo se ha vuelto tonto de repente?” El profesor sonrío de manera irónica, se encogió de hombros y contestó: “Tampoco es que sacara buenas notas antes…” Mi madre le contestó diciendo que eso era falso, pero aquel tipo zanjó el asunto: Yo era un inútil, un vago, que se pasaba todo el día en las nubes, no prestaba atención en clase, me evadía y me iba a mi mundo. Si bien esto último era cierto; creo que su obligación era haber averiguado por qué necesitaba evadirme.

Cuando había un Gran Premio de Fórmula 1 en las antípodas, me levantaba a las 6 o las 7 de la mañana para ver la carrera. Me hacía más de 10 kilómetros de marcha por el campo para disfrutar de la naturaleza y devoraba libros como quien come pistachos… Y aun así, yo era un vago.

Mis padres, tras el encuentro con aquel tutor, no les quedó otra que creer esa patraña y me educaron en consecuencia. Quizá cometieron un error pero, ¿qué podían hacer? La culpa no fue suya, sino de un sistema educativo que castiga a quien piense o actúe diferente.

Ellos fueron quienes intentaron limar lo que ellos creían que eran defectos para que yo pudiera encajar.

 

20 años después de la reunión con aquel profesor, tras miles de euros gastados en psiquiatras y psicólogos, traumas y fracasos, una doctora por fin vio que yo no era la pieza defectuosa de un puzle, sino una tan valiosa como cualquier otra, pero de otra caja. Como el patito feo que, al final del cuento, descubre que en verdad es un cisne.

 

Ésta es mi experiencia como persona con trastorno autista. Si conocéis a alguien que, como yo, tiene esta condición, es muy probable que haya pasado por una experiencia similar a la mía, o puede que no. Como cualquier otra persona, cada uno de nosotros es un mundo; algunos querrán encajar y otros, como yo, tengan fobia social y prefieran estar solos.

A mí me encantan los aviones, a otros les apasiona la fauna salvaje y otros puede que su tema favorito sea la arquitectura neoclásica. Pero si hay algo que tenemos en común es la pasión con la que vivimos nuestras aficiones. Por ello, termino con una petición, casi una súplica. Siempre que no implique daño a nadie, por favor; dejadnos ser nosotros mismos.

DEJADNOS SER FELICES.

 

Firmado: Álvaro R.F

VIVIENDA SUPERVISADA: NUESTRO HOGAR. 

Actualmente en Salud Mental Aranda contamos con 4 viviendas supervisadas, con 14 plazas en total. Mucha gente se preguntará en qué consiste este servicio y cuáles son los beneficios para las personas que viven en ellas. Tres de las personas que residen en estos pisos quieren explicar desde su experiencia cómo se sienten y qué beneficios les aporta este recurso. (Para preservar la intimidad de los participantes se les ha asignado un pseudónimo). 

 

¿Cómo te sientes en la vivienda? 

Abedul: El tiempo que paso es un tiempo confortable, tenemos tiempo para ducharnos, leer, hacer actividades, cocinar. Puedo dedicar tiempo al descanso. Me siento más libre ya que puedo comprar cosas extras en los establecimientos cercanos a casa.  

Hortensia: En la vivienda me siento muy bien con las compañeras que tengo, nos apoyamos las unas a las otras. Estoy contenta con ellas, con la situación que tengo ahora. Me habéis ayudado a conseguir lo que necesitaba que era salir de ese piso en el que estaba sola y tengo a unas compañeras que aprecio junto con los monitores.   

Campanilla: Me siento bien con mis compañeras. Hacemos tareas del hogar, actividades personales, nos cuidamos entre nosotras. Me gusta porque me encuentro acompañada y más independiente. 

 

¿Qué diferencia hay entre vivir en otro recurso y la vivienda? 

Abedul: Me siento más libre, se coordinan actividades de forma más libre sin que todo esté tan organizado por tiempo y horarios. Tengo una nevera en casa donde poder meter mis cosas…  

En el otro recurso se imponen los horarios es todo muy estructurado. Aquí puedo salir al mercado, comprar… ¡Me gusta más esto!  

Hortensia: Antes, en mi piso, sentía mucha ansiedad y no me encontraba bien, sentía que no podía salir de ese bucle. Ahora estoy acompañada, hablo, salgo, veo la tele, mejorando poco a poco la ansiedad y aprendiendo cosas nuevas. Quiero aprovecharlo todo lo que pueda.   

Campanilla: Yo he vivido en una residencia y es muy diferente, nunca sabes dónde vas a acabar. Allí, también hacia muchas cosas, pero no creo que fuese mi lugar, aún soy muy joven y estoy mucho mejor aquí. Aquí salgo, entro, hago más las cosas que me gustan, estoy más tranquila. Estoy mucho mejor estando rodeada de gente de mi edad. Allí veía mucha gente mayor y me daba nostalgia y me hacía pensar mucho, dar vueltas a mi cabeza por ver como se encontraban los demás.   

 

¿Qué tiene para ti más valor? 

Abedul: Tener libertad para actuar.  

Hortensia: Para mí lo que más valor tiene es, no sentirme sola, porque la soledad a largo plazo sé que me perjudica. Ahora que estoy acompañada, significa volver a vivir bien. No cambiaría la oportunidad que tengo y la quiero aprovechar al máximo. Tengo unas compañeras y unos monitores a los que aprecio mucho.   

Campanilla: Ahora mismo, tener una vivienda donde poder vivir tranquila.   

 

¿Te parece útil el recurso? 

Abedul: Sí, me gusta el diálogo que existe, que compartimos tiempo y espacios, colaboramos entre los compañeros y nos ayudamos, es muy sencillo vivir aquí. 

Hortensia: Siento que es muy útil porque antes no me cuidaba lo suficiente. Iba a urgencias cada dos por tres, comía bocadillos y apenas me cocinaba. Ahora me siento más útil al hacer cosas y apoyar a mis compañeras. Cuando cocino o hago otras cosas, me siento mucho mejor, aprendo muchas cosas.   

Campanilla: Si, tienes un techo donde vivir y me ayudan, me apoyan, aprendo cosas nuevas y me siento mucho más realizada.   

 

Fdo. Participantes, con el apoyo del equipo técnico de Viviendas Supervisadas. 

Mi experiencia de prácticas de Educación Social

He tenido la oportunidad y la suerte de poder pertenecer a esta asociación durante 9 meses de mi vida, 9 maravillosos meses que han pasado muy rápido, significado de que he estado muy feliz aquí. Mi experiencia ha sido maravillosa desde el primer día que pisé la asociación, cuando conocí a Patri, la persona que ha sido mi tutora en todo este proceso, me dio tanta tranquilidad que supe que no me había equivocado de lugar. Me presentó al resto de compañeras que en ese momento estaban en la asociación y sentí que estaba dónde tenía que estar, todas me acogieron y me brindaron calor en ese primer día de nervios.  

Los participantes, de igual manera que las técnicas de la asociación, me trataron con muchísimo respeto desde el primer día, nunca me sentí aislada del grupo, siempre se preocupaban por saber de mí, por preguntarme cosas para romper el hielo y que yo pudiese sentirme bien, una más, y lo consiguieron.  

 

Me han gustado mucho los programas que he visto, de todos he aprendido cosas y me he sentido bien, quizá tengo especial cariño al programa de centro de día, ya que fue dónde más pude desenvolverme porque pude tener un taller propio, aunque también tuve talleres en otros programas, para mi este fue el más especial. ’A través de ti’, dónde quería demostrarles todas las capacidades que tenían y que pensaban que no. Que son capaces de hacer muchas cosas que creían que no podían, por el hecho de llevar años sin hacerlas. En definitiva, mi objetivo era que se marcharan del taller con autoestima y diciéndose a ellos mismos que pueden y que son capaces, porque lo son. 

Estoy agradecida porque he aprendido muchísimo, siempre me han dejado ser yo, nunca me he sentido juzgada y siempre he sentido que tenía un respaldo si me equivocaba, me han apoyado en el proceso y ayudado siempre que he necesitado ayuda, me han dotado de muchas herramientas para poder desenvolverme de una forma óptima y útil. He sentido el apoyo y el reconocimiento de todos, me he sentido muy valorada en todo lo que hacía y no miento cuando digo que han sido unos de los mejores meses de mi vida. 

Estoy feliz y agradecida porque he sido capaz de enfrentarme a cosas que me daban miedo, y lo he conseguido con ayuda de todos; porque he creado un vínculo muy grande con la mayoría de los participantes; por la forma en la que me he dejado conocer y en la que he podido conocer a todas las personas que forman esta maravillosa asociación; por ver que las personas que trabajan aquí son personas muy profesionales y con un afán inmenso por ayudar al resto; porque me he ido de la asociación siendo mejor persona; por todo el cariño que se me ha dado siempre; porque he aprendido, y me llevo mucho más de lo que yo he podido dar a la asociación; Estoy feliz por tantas cosas que este papel se me queda pequeño. 

Siempre voy a estar inmensamente agradecida de haber tenido la suerte de formarme en Salud Mental Aranda. Me he ido con el corazón lleno de cosas bonitas.  

Infinitas gracias. 

 Fdo. Yesica Bartolomé Hermo. 

 

LA GUERRA DEL AMOR

Como escuché en una serie y todos bien sabemos, el amor y el dolor son sentimientos impacientes, egoístas y aliados y si los intentas ignorar gritan, gritan hasta que solo los escuchas a ellos.

Siempre se ha dicho que en el amor y la guerra todo vale, y es que muchas veces esos conceptos se convierten en sinónimos.

Se unen. Toda guerra es una lucha o disputa por un conflicto de intereses que suele dar lugar al sufrimiento de una o ambas partes. Sin embargo, la guerra del amor es la más bonita, aunque también puede ser la más dolorosa.

Y qué mejor guerra que la de dos enamorados peleando por quién cuelga el teléfono o defendiendo entre gritos y sonrisas un “yo te quiero más”.

Solo aquel dispuesto a luchar dicha batalla puede ser merecedor y por tanto “poseer” el más lujoso tesoro, sentimientos puros de amor, y el más valioso territorio, un hueco dentro del corazón de la persona indicada. Así como la más bella sonrisa a conjunto con su brillo de ilusión en el interior de los ojos. Pero esta no es una guerra fácil, incluso arriesgándote una y mil veces puedes no lograrlo y salir perdedor batalla tras batalla, más si dejas de intentarlo serás perdedor igualmente.

El amor, como cualquier guerra, no deja indiferente a nadie, cambia por completo la vida de todos aquellos a quienes arrolla sin remordimientos, el amor vuelve cobarde al valiente y valiente al cobarde, crea inseguridades al que más se quiere, obliga al más despistado a recordar por primera vez la fecha de un cumpleaños o los gustos de otra persona, y hace que el más organizado deje de lado responsabilidades por quedarse viendo una peli. El amor revive a aquel que estaba muerto en vida y provoca que el más vivo muera de amor por alguien.

El amor puede ser doloroso, volvernos estúpidos, cambiarnos; puede hacer que nos olvidemos de nosotros mismos, incluso de todo nuestro pasado o de quién éramos hasta aquel día que Cupido nos flechó, pero es la mejor de las guerras que cualquiera podría disputar.

Cerodoce

COMITÉ PRO SALUD MENTAL ARANDA

El Comité Pro Salud Mental Aranda es un espacio para todos l@s participantes que acudimos a la asociación, con el objetivo de juntarnos, hablar sobre cuestiones y temas que nos interesan y preocupan, recibir información y trasladar aquellas cuestiones que consideramos importantes, y que llegan al equipo técnico y a la Junta Directiva.

Tiene ya una andadura de unos 10 años, el primero fue iniciativa de nuestra presidenta Elena Briongos y después se ha ido consolidando hasta la actualidad. Es una de las actividades a la que más asisten los participantes de la asociación y funciona muy bien desde siempre.

Celebramos el Comité normalmente el último viernes de mes, exceptuando que coincida con festivo u otra actividad que impida realizarlo.

La reunión del Comité se realiza en la sede de la asociación de la Plaza San Esteban y está compuesta por un secretario y moderador, la coordinadora (que es una técnica de la asociación) y todas aquellas personas que acudan, que suelen ser unos 20 participantes.

Cada vez que una persona se une al comité, se le informa de las normas que rigen la reunión, que son: respeto hacia todas las personas y de todos los temas, y hablar respetando el turno. También se informa que se elabora un acta de cada reunión y se recalca que lo que se hable se quedará entre nosotros, pues en el acta se registra todo de forma anónima.

La duración del Comité Pro Salud Mental suele durar en torno a una hora y media.

En él se tratan temas de acontecimientos que han pasado, que están sucediendo o que van a suceder y tienen incidencia en la asociación.

Hay un grupo de personas que se encargan de la preparación del Comité, y se reúnen una vez al mes, previo a la realización del Comité, con el apoyo de la coordinadora, y se encargan de trasladar aquellas cuestiones que consideran que pueden ser de interés de tod@s, temas que le han propuesto otras personas, agenda de las actividades de la asociación, y un largo abanico de temas, que se van proponiendo en el Comité. En esta reunión, se resume todo en una presentación, para sintetizar los temas, y que nos ayude a elaborar el acta de la reunión, donde se deja constancia de los temas tratados y de los acuerdos.

Existe un Comité Pro Salud Mental a nivel regional, que lo coordina la Federación Salud Mental Castilla y León, y en el que participamos con la asistencia de uno de nosotros. También, hay un Comité Pro Salud Mental a nivel nacional, de la Confederación Salud Mental España, y en él participa nuestro representante regional. Como se puede apreciar, los Comités son estructuras muy consolidadas, que ya tienen un gran recorrido, y que su repercusión es muy importante a nivel organizativo en las entidades del movimiento Salud Mental.

Todos los que asistimos siempre salimos muy contentos, y es por ello, que animamos a más participantes de la asociación, a que se unan y conozcan el Comité, ya que es un espacio nuestro, de todas las personas que participamos en los servicios de Salud Mental Aranda.

¡¡ OS ANIMAMOS A QUE LO CONOZCAIS POR VOSOTR@S MISM@S!!

Casa Rural La Tarja

Salida el viernes 1 de diciembre a las 11.40 parking ambulatorio sur.

Llegada a Martin Miguel (Segovia) Casa Rural La Tarja y recibimiento de Victoria, la dueña de la casa con pastas.

Se repartieron dos grupos, 1 y 2. El uno hizo la comida: macarrones con carne picada y atún. Por la tarde visitamos el pueblo de a lado, Valverde del Majano.

Un pueblo de categoría, tenía de todo: frontón y pista de tenis, y varios polideportivos, ya llegando al bar se puso a granizar y cuando estábamos dentro cayó una tormenta impresionante y cuando nos íbamos dejó de llover. Tuvimos suerte pues nos acompañó el tiempo.

Llegamos a la Casa Rural y nos pusimos a hacer juegos de mesa. Después el grupo 2 fuimos a preparar la cena, tortilla de patata. Nos pusimos a comer y después de la cena algunos se pusieron a ver una película y otros nos fuimos a la cama.

El sábado por la mañana, estuvimos en el Alcázar de Segovia, que data de principios del siglo XII, es uno de los castillos medievales más famosos del mundo y uno de los monumentos más visitados de España. Por sus estancias han pasado veintidós reyes, además de algunos de los personajes más destacados de la historia. Nos costó encontrar aparcamiento. Cuando entramos en el Alcázar, todo lo que se veía era precioso, nada más al entrar lo primero que vimos fue armaduras de caballeros y soldados. La siguiente sala tenía unos cuadros preciosos y unos techos muy bonitos. Otra de las salas unos cañones y mesas. Se me ocurrió subir al torreón que tenía 140 peldaños de caracol, menos mal que a los 80 peldaños tenía un mirador y no sé cómo llegué ya que mis piernas ya no podían más. Otros compañeros subieron hasta arriba, yo me bajé y me fui con unos compañeros a tomar un café y ya nos juntamos todos y nos fuimos a la Casa Rural.

El quipo 2 hizo la comida; Arroz a la cubana. Tras comer salimos a visitar por la tarde el Castillo de Turégano

Hubo una construcción medieval con torres sobre la que se especula que fue de origen árabe; de esta época se conservan algunas torres y muros de tapial en lado norte del exterior del castillo.

Posteriormente el obispo Pedro de Agén, a finales del siglo XII inició la construcción, en este espacio fortificado, de la iglesia de San Miguel, de estilo románico.

En torno al templo se levantó la fortaleza-palacio a partir de 1471 a iniciativa del obispo Arias Dávila, que se ampliaría en diversas ocasiones. Más adelante, en el siglo XVI se perfeccionó la fortaleza con muros, acondicionados para la defensa con armas de fuego, y reforzados con torres cilíndricas.

En el centro del pueblo había un mercadillo Navideño y estuvimos viéndole y picamos un poco de todo y nos fuimos a tomar un café. Nos juntamos todos y de regreso a la Casa Rural, previo a la cena jugamos un bingo.

El equipo 1 preparo la cena: hamburguesas y perritos calientes. Después pasamos la noche viendo una película todos juntos y luego todos a la cama.

El domingo ya nuestro último día, desayunamos, recogimos la casa y preparamos los bocadillos y salimos a visitar el pueblo de Pedraza, con su castillo medieval y sus calles estrechas.

Castillo de Pedraza, en la provincia de Segovia fue construido en el siglo XIII, de origen romano y árabe. Está situado en una zona defensiva clave. Vimos el pueblo y pudimos comer todos juntos en un bar, luego fuimos a otro bar a tomar el cafecillo y vuelta Aranda que llegamos sobre las 17.30h.

Fue un fin de semana distinto, lleno de actividades, convivencia y lo pasamos muy bien.

Fdo. Doroteo Vegas Gutiérrez.